¡TENEMOS BUENAS NOTICIAS!

Tenemos buenas noticias, se han sumado a nuestro catálogo nuevas sondas de medición de cloro, pero no son cualquier sonda, son sondas que tienen baja dependencia a las variaciones del pH, mejorando la respuesta de la medición y su estabilidad, además, permiten prescindir de un sistema de control de pH si no lo requieres o no es posible implementar, ya que esto último puede ser un motivo para no probar esta tecnología.

Sabemos que el pH es crítico cuando de desinfección con cloro se trata, si no lo sabias lo explico en simple rápidamente.

El pH desempeña un papel crítico en el proceso de desinfección con hipoclorito de sodio, comúnmente conocido como cloro. El hipoclorito de sodio es una sustancia química altamente efectiva para matar microorganismos, como bacterias y virus, y su eficacia está directamente relacionada con el pH del agua en la que se encuentra. En soluciones acuosas, el cloro libre, la forma activa del cloro, existe en su máxima eficacia cuando el pH se mantiene en un rango específico, generalmente entre 6.0 y 7.5. En un pH más bajo (ácido), el cloro libre se consume rápidamente y se vuelve menos efectivo, mientras que en un pH más alto (alcalino), el cloro también se descompone más rápido y no puede desinfectar de manera eficaz. Por lo tanto, es crucial controlar y mantener el pH del agua en este rango óptimo para garantizar una desinfección efectiva con hipoclorito de sodio.

En resumen, el pH adecuado es esencial para que el hipoclorito de sodio funcione eficazmente como agente desinfectante. Mantener el pH dentro del rango óptimo garantiza que el cloro se mantenga en su forma activa, lo que permite eliminar de manera efectiva microorganismos dañinos en el agua. Esto resalta la importancia de monitorear y ajustar el pH en sistemas de desinfección que utilizan hipoclorito de sodio para garantizar un ambiente más seguro y saludable. 

Pero, si el pH es tan importante en el proceso de desinfección ¿por qué no controlarlo?

Bueno, no siempre se puede o quiere controlar el pH,  aun cuando la desinfección es más efectiva en un rango entre 6.0 y 7.5, la normativa chilena permite para el agua potable un rango entre 6.5 y 8.5, por lo que al momento de evaluar un sistema de medición y control de cloro por sonda amperométrica que requiere un pH estable muchas veces no es opción.

Es aquí donde entran en juego las nuevas sondas amperométricas de cloro, porque al tener una dependencia tan baja a las variaciones del pH no se requiere un sistema adicional para corregirlo, abriendo las posibilidades a aquellos clientes que hoy dependen de reactivos y quieren probar un sistema cada vez más eficiente y con menores costos de operación y mantenimiento.

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